El trabajo sigue adelante incluso durante el verano. La pasada semana se terminó la restauración de la jarra de cerámica vidriada, tipo Puente del Arzobispo, perteneciente a la colección Rodríguez-Acosta.
Según el inventario de José Pastor, esta jarra estaba ubicada en la habitación de recepción del estudio del pintor José María Rodríguez-Acosta. Por motivos que desconocemos llegó hasta nuestros días en mal estado de conservación, muy fragmentada y sucia, con lañados desprendidos.
La restauradora Isabel Cambil Campaña ha realizado el proceso de limpieza y pegado de los fragmentos, así como el entonado de las zonas reintegradas. Este trabajo ha dado un magnífico resultado, quedando la pieza en un estado aceptable para su musealización dentro del entorno que le corresponde.
Pronto podremos ubicarla en su lugar original y definitivo dentro de la segunda planta del carmen de la Fundación, en el estudio del pintor. Mientras tanto lo hemos aproximado, en este rincón de la sala recibidor del estudio.
¡Seguimos adelante!