Cristo en la cruz

Esta pintura está enmarcada por un fondo arquitectónico de arcos lobulados góticos, tallado en la propia tabla. En ella aparece Cristo crucificado con San Juan y María. El fondo es dorado y grabado, imitando la textura de un tapiz floral. La atribución a Borrassá, antigua y que podría justificarse por la figura del Crucificado -muy cercana a otras del pintor- ha sido puesta en duda recientemente por algunos estudiosos que, basándose en el arreglo compositivo y en los tipos de María y San Juan, la creen obra italiana. Esta pieza fue parte central de un retablo, tal como se desprende de la organización del grueso de la tabla. Fue un regalo de D. José Weisbérger a D. Manuel Gómez-Moreno Martínez. / Extraído de: A.A.V.V.: Instituto Gómez-Moreno (catálogo). Granada, 1992, p. 113.