Angosturas del Darro

Debemos considerar este paisaje el paradigma de cuantos realizara al artista a lo largo de toda su vida. Desde la quieta tensión del formato, casi un cuadrado, hasta ese rasgo que viene apareciendo constantemente, de aproximación al objeto, todo permite al pintor extraer las más diversas posibilidades cromáticas (verdes, rosas, violetas, malvas, ocres) que un primer plano tan violento presenta. Hay que añadir que esta composición ha eliminado radicalmente la visión de los celajes, lo que más se identifica con el aire, configurando una atmósfera totalmente respirable, que denota los años de aprendizaje y el conocimiento y asimilación de las experiencias pictóricas de artistas anteriores. / Extraído de: Revilla Uceda, M. A.: José María Rodríguez-Acosta 1878-1941. Granada, 1992, p. 268.Bibliografía: Quesada Dorador, E., et alii.: Paisajes de Granada de José María Rodríguez-Acosta. Granada, 2005, pp. 106-108.